Al contrario de lo que muchas personas piensan sobre la filosofía, el estoicismo es eminentemente práctico. Basta conocer la biografía de alguno de los principales filósofos estoicos, para darnos cuenta de que no encajan dentro de la imagen preconcebida que tenemos de ellos. Epícteto era un esclavo que alcanzó la libertad y llegó a convertirse en un famoso profesor amigo de emperadores, Séneca, fue dramaturgo y uno de los hombre más ricos de su época, o el emperador Marco Aurelio, que pasó parte de su vida librando batallas a miles de kilómetros de Roma.
Para los estoicos, los seres humanos debemos actuar de acuerdo a nuestra naturaleza, esto es hacerlo como seres racionales y sociales. Actuando con virtud (sabiduría, justicia, coraje y disciplina, entre otras) alcanzaremos a felicidad, pero debemos comprender que solo podemos controlar nuestros pensamientos y nuestras acciones, siendo la principal causa de infelicidad nuestra interpretación errónea de las situaciones así como el intentar influir sobre aquello que no podemos controlar.
Toma este momento. Sumérgete en sus detalles. Responde a esta persona, este desafío, esta acción. Deja las evasiones. Deja de buscar problemas innecesarios. Es hora de vivir; para habitar por completo la situación en la que te encuentras ahora
Epícteto
Los estoicos organizaban sus enseñanzas en 3 disciplinas fundamentales:
- La disciplina de la percepción. Trata sobre la forma en que vemos y percibimos el mundo
- La disciplina de la acción. Trata sobre las decisiones que tomamos y como estas se transforman en acciones
- La disciplina de la voluntad. Trata sobre cómo afrontar todo aquello a lo que nos enfrentamos, de una forma correcta, independientemente de las consecuencias que se puedan producir
Al controlar nuestras percepciones (primeras impresiones), adquirimos claridad mental, que junto a la voluntad de actuar de acuerdo a nuestros valores, nos lleva a que nuestras acciones sean correctas y justas y de esa forma encontramos la sabiduría y el coraje para enfrentar cualquier obstáculo que se nos presente.
Si estás estresado, tienes problemas en casa o en el trabajo, te encuentras perdido, asustado o quieres ser más productivo, el estoicismo puede ayudarte, cómo ya ha hecho con miles de personas tanto en el pasado como en la actualidad.